Carmen Gomez Moruno y Cristina Parada son las doctoras que viajaron a Pinre, Burkina- Faso con la ONGD MENUTS DEL MÓN. Transcribo textualmente sus palabras. Esta página del blog es de ellas.
Habla Carmen : » Yo creo que vimos unos 100 niños entre las dos. Las patologías más frecuentes fueron problemas dermatológicos (tiñas, erupciones, etc) y traumatismos. Yo esperaba encontrarlos peor pero lo cierto es que los vi en general bastante sanos, lo que si debe ocurrir es que si enferman no podrán sobrevivir (esto lo vemos además porque apenas habían ancianos).
Los índice de mortalidad infantil y materna de un país son los mejores indicadores de desarrollo de este, no sé lo datos exactos de Burkina pero fácil que sea de lo más altos.
Me encantó la experiencia, los niños eran educados, no lloraban me miraban con asombro y sonreían. A veces mostraban miedo y curiosidad pero solo con la mirada de sus madres se calmaban, vi mucho respeto por los mayores. Sus madres me indicaban lo que les preocupaba con el dedo y alguna traducción de Hamado, el guía y después de una mínima actuación por mi parte me sonreían agradeciendo.
La gente mayor que vi tenían problemas extremos que aquí son impensables de ver ( vi un bocio enorme que apenas dejaba hablar a la mujer).
Yo a nivel sanitario me quedo con lo que nos comentó la maestra, valoran nuestra ayuda llevando material y medicación, pero lo que realmente necesitan es que exista la posibilidad de un dispensario donde ellos puedan adquirir, comprar medicamentos . Otro ejemplo de dignidad que me emocionó de este país.»
Nos cuenta su experiencia Cristina Parada: «
Un grupo de voluntarias de Menuts del Món, visitamos Pinre, en Burkina Faso. Un lugar remoto que no aparece en el mapa, pero con unas personas maravillosas y puro corazón luchando por su supervivencia y tratando de lograr para sus hijos un mundo mejor. Por eso los llevan a la escuela, que es objeto de uno de nuestros proyectos de colaboración.
El segundo día de nuestra estancia en Pinre, nos dividimos las tareas entre todas, juntamente con mi compañera médico Carmen Moruno nos dedicamos a hacer curas, sobre todo a los niños y algunas personas mayores. Llamaba la atención que las madres no pedían nada para ellas, sino para sus hijos.
La afección más común que encontramos fue una micosis la Dematofitosis, (Tiña), la mayoría la presentaban en el cuero cabelludo, aunque algunos ya lo tenían extendida por el resto del cuerpo. La transmisión de éste hongo se produce por contacto directo de piel a piel o roce con cabellos de personas infectadas, es por ese motivo que en casi el 100% de los niños la padezcan.
Atendimos pocos casos de heridas en las piernas y los pies. Lo extraño es que no vimos en los niños signos de resfriados, fiebres ni otros síntomas. Las raras personas mayores que vimos eran por dolores musculares.
¿Qué sentimos?, pues impotencia por no poder hacer más, en primer lugar por el tiempo (una mañana) y la medicación con que contábamos, solo desinfectantes, gasas, pomadas, cremas hidratantes, etc. que fueron insuficientes.
Para las micosis se necesitan además de pomadas con Miconazol, Clotriconazol y fungicidas en polvo o en tabletas orales Ketaconazol Griseofulvina, etc. Tampoco podíamos darles medidas profilácticas y prevención: higiene personal, no compartir toallas ni ropa. (En el poblado no tienen más que una bomba de agua que es para todo).
Dejamos algunos medicamentos a las profesoras (que son un poco autoridades para ellos), es les indicó para que se utilizaban, pero, vimos que eso es insuficiente y acordamos que en el futuro montaremos un dispensario y un depósito de los medicamentos más indispensables.
En resumen ha sido una experiencia que no se puede descifrar. Lo poco que hemos hecho para ellos significa mucho y lo agradecen con cariño.Nos hace reflexionar de cómo lo tomamos nosotros, siempre inconformes, reclamando más atención y ellos tan agradecidos.
La verdad es que pensamos que vamos a “dar” y los que recibimos y aprendemos de ellos somos nosotros».
Estos son los relatos de mis compañeras de viaje. Agradezco su trabajo voluntario, su empatia, su solidaridad, su amistad.
Si te interesa África, sus gentes, su cultura, la manera de expresar sus emociones, sus colores y los sentimientos que desprende quizá te guste este BLOG